El proyecto nace de la necesidad de conectar la plaza mayor de Rocafort con la zona de huerta situada al Este del municipio y revitalizar la zona. Para ello era conveniente facilitar el acceso y adecuarlo mediante el soterramiento de las vías del metro que une la población con Valencia y la eliminación del campo del fútbol de polideportivo municipal, consiguiendo así un escenario ideal para la conexión con la huerta, así como una antesala, en forma de gran parque, para el disfrute de los recorridos rurales. La situación de este nuevo punto de atracción en el municipio lleva consigo otras actuaciones de adecuación del entorno urbano del casco histórico del pueblo. Para ello, se rediseña el Carrer del Pou, que conecta la Plaza Mayor con la nueva zona de actuación, y se procede a la reconfiguración tanto estética como funcional de la Plaza Mayor de Rocafort, con el objetivo de convertirla en un reclamo tanto para los vecinos del pueblo, como para visitantes.